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PEREGRINEA 2023. LA DIFICULTAD QUE ENSAMBLA

Regalamos unos instantes al teclado olvidado, a las letras arrinconadas durante estos diez intensos y entrañables días de comunión caminante. El cuerpo derrotado reclama su prometido alto, el espíritu fortalecido su anhelo de recapitular, agradecer y compartir desde lo más hondo.

La furgoneta de alquiler brinca vacía camino de Estella. La grandes ollas reposan en las estanterías destartaladas. Secamos con paños nuevos las tiendas empapadas por las tozudas tormentas. Nos dividimos los pepinos largos franceses, el queso mantecoso de Camembert y los tomates de pera baratos. Lo que no hemos podido dividir ha sido el corazón unido, la comunión forjada a lo largo de los intensos días de Peregrinación por Tierra Cátara. Lo que las difíciles circunstancias no han logrado fragmentar ha sido el Corazón Uno.

Ni la ola de calor sin precedentes, ni el agua derramada a raudales sobre los cuerpos y los nylons de colores pudo detener a los peregrinos que avanzaban con el recuerdo de “los hombres y mujeres buenos†en su interior, de quienes encendieron luz en medio de las más cerradas tinieblas. Damos gracias infinitas al Cielo pues, pese a las difíciles circunstancias vividas, todo ha transcurrido con bien y en suprema armonía grupal. Al mirarnos ojerosos en aquella mañana en la que muchos amanecieron con sacos y colchonetas mojadas por la lluvia que no cesó durante toda la noche, pudimos atisbar un Camino que aún se prolongaba más allá de lo programado; pudimos constatar una madurez y empuje adquiridos, sentirnos, si cabe, aún más cuerpo unido. La dificultad terminó de ensamblarnos.

Por eso, cuando en el círculo de despedida de hoy a la mañana ya en Artaza, alguien habló de Tierra Santa, un escalofrío que sacudió el cuerpo nos comunicó que quizás podría ser. Constatamos que nuestros latidos se aceleraban, que si el Cielo tiene a bien abrir Caminos, juntos y juntas podríamos. Si pudimos ante las pruebas extremas del fuego y del agua, un círculo de danza, oración y paz nos puede estar aguardando allí en el Oriente Medio, en esa geografía sagrada donde el humano aún confronta.

Volvemos al mundo y aún vuelan misiles en Ucrania, persiste la guerra infame cuando nuestra voluntad de paz torna más insobornable. ¿Próxima cita en Jerusalem? Por de pronto ya hay quien se ha puesto a repasar los irregulares en inglés. ¡Hágase Su Santa y Bendita Voluntad, nunca la nuestra!

Artaza 30 de Agosto de 2023
www.aroa.eus

 
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